Era la tercera vez que visitaba esta ciudad-estado, considerada como una de las más bonitas del sudeste asiático, y seguía teniendo la misma ilusión por volver que cuando fui por primera vez y es que viajar de la mano de Singapore Airlines, una de las mejores aerolíneas del mundo como os contaba en mi post anterior y en el que podéis encontrar todos los detalles sobre la misma, y tener la oportunidad de descubrir nuevos rincones de esta urbe para vivir experiencias especiales organizadas por Visit Singapore marca la diferencia.
En el Espectacular Aeropuerto Changi
Si hay algo que define a Singapur son sus numerosos contrastes que se reflejan tanto a nivel humano (por las de personas de diferentes culturas y religiones que allí conviven pacíficamente) como a nivel visual (por la arquitectura colonial que se intercala con otra imponente de aires futuristas y donde la naturaleza tiene presencia importante) al igual que por su gran variedad de olores y sabores. Estas mezclas son herencia, en gran parte, de su historia y es que en el II d.C se establecieron allí los primeros humanos, posteriormente en 1819 el británico Thomas Stamford Raffles fundó el nuevo Singapur, luego los japoneses la ocuparon en la II Guerra Mundial y en 1963 se declaró su independencia del Reino Unido.
A continuación voy a haceros un resumen del recorrido por la ciudad que hice en esta ocasión y de algunas de las bonitas experiencias que allí viví:
¿Qué visitar?
Barrio Chino. Este barrio que tiene gran ambiente y está repleto de tiendas y restaurantes fue fundado por los primeros colonos chinos que llegaron a la ciudad allá por 1821. Aquí no os podéis perder la visita al templo budista famoso por acoger un diente que perteneció a Buda.
Barrio Árabe conocido con el nombre de Kampong Glam, fue una de las primeras zonas habitadas de Singapur donde se puede palpar la cultura árabe en cada uno de sus rincones. Destacan entre todas la calle Arab repleta de tiendas y restaurantes árabes y Bussorah Mall al final de la cual se encuentra la espectacular Mezquita del Sultán construida en 1924.
Barrio Indio o también conocido como “Little India” fue fundada por los primeros inmigrantes indios que llegaros a la ciudad en 1819. Este barrio nos muestra un pedacito de la India en mitad de Singapur con su encantadora gente, sus olores, sus flores, su moda…
Jardines de la Bahía son los espectaculares jardines que se encuentran detrás del Marina Bays Sands, un imponente edificio convertido en el más simbólico de la ciudad desde que se inaugurara en el 2014 y que alberga un hotel, centro comercial, centro de convenciones y el Museo de Arte y Ciencia, entre otras cosas. En la planta 57 (a 200 metros de altura) se encuentra su gran terraza en forma de barco donde hay un piscina infinita que solo pueden usar los clientes del hotel y desde donde se puede disfrutar de una de las mejores vistas de la ciudad. Los jardines se crearon en 2012 y tienen muchas zonas para visitar: los Supertrees, la pasarela OCBC Skyway, Cloud Forest (cuenta con una cascada cubierta de 35 metros de altura) y el Flower Dome. Esta especie de parque temático es un lugar al que es recomendable dedicar tiempo para visitar ya que es como un libro abierto en el que se puede aprender muchísimo sobre botánica. Imprescindible no perderse el espectáculo gratuito de luces y sonido Garden Rhapsody que tiene lugar todos los días.
Los Jardines Botánicos y su jardín especial dedicado a la orquídeas. Es de los lugares más bonitos en los que he estado en mi vida. Si os gustan la plantas y, en concreto, las orquídeas, éste es el lugar ideal para poder admirar su belleza desde cerca. Hay una gran variedad de ellas, nunca vistas antes, con múltiples formas y colores.
Galería Nacional. Fue inaugurada en el 2014 y es un museo de arte situado en el centro de la ciudad que alberga la mayor colección pública de Singapur y Sudeste asiático compuesta por unas 8000 obras de arte. Su emblemático edificio fue antiguamente el Ayuntamiento y el Palacio Judicial, de ahí que se sigan conservando algunas de las celdas donde se encerraban a los presos de la época.
Marina Bay y el Parque MerLion. El paseo marítimo que rodea a Marina Bay es muy agradable para caminar y disfrutar del gran ambiente. Allí descubriréis “MerLion”, una figura gigante mítica que representa el símbolo de la ciudad y tiene cabeza de león y cuerpo de pez.
Isla de Sentosa. Es una isla turística artificial donde los singapurenses vas a descansar, disfrutar de la playa y practicar todo tipo de deportes acuáticos.
¿Qué experiencias no podéis perderos?
Visita a una casa de la comunidad “Peranakan” que son descendientes de los primeros inmigrantes chinos (los primeros son del S.XV) que llegaron a Singapur. Destacan por la influencia europea en su estilo de vida. Concretamente, visitamos “The Intan”, la casa/museo de Alvin Yapp y su madre donde pudimos admirar la colección de piezas antiguas (especialmente de moda y artículos de decoración) que ha creado. Me hizo especial ilusión descubrir los cientos de figuras religiosas católicas que ha ido comprando por el mundo.
En este barrio destacan sus originales casas antiguas de colores!!
Paseo en patinete eléctrico por la ciudad. Organizado por Singapore Fantastic, puedo decir que este fue uno de los planes que más disfruté durante mi viaje. Conocer rincones de la ciudad subida en un patinete eléctrico me pareció una manera diferente y divertida de descubrir nuevos rincones pero, eso sí, hay que tener extremo cuidado a la hora de manejarlos.
Clases de cocina con Cookery Magic. Poder aprender las recetas de los platos más típicos de Singapur como son el satay, el arroz y los noodles con la Chef Ruqxana, que recibe con gran cariño en su propia casa, es también una experiencia muy enriquecedora. La mejor guinda de este plan es poder disfrutar de la comida elaborada en compañía de tu grupo de amigos con los que has cocinado.
Crucerito por Marina Bay. Se embarca en Clarque Quay, un pequeño puertecito con gran encanto situado en el centro de la ciudad y que sigue manteniendo su arquitectura colonial. Este agradable paseo en barco te regala otra visión diferente de Singapur desde la misma bahía.
Darse un masaje de pies. Es algo muy típico de allí que forma parte de la rutina de la gente local. La reflexología podal hay que reconocer que es dolorosa, ya que conecta con todos los órganos del cuerpo para ponerlos en equilibrio pero te deja como nueva!!
Shopping con estilo
DGA Threads. Justo enfrente del Mercado Tiong Bahru, esta tienda fue todo un descubrimiento. Maravillosa su selección de ropa de estilo asiático. Me enamoré de sus preciosos kimonos de elegantes tejidos. Pino, su encantador propietario que es italiano, me dio buenísimas lecciones de cómo ponerse cada prenda!!
Alojamiento
Parkroyal On Pickering. Impresionante su edificio en el que destaca en su fachada la vegetación integrada al más puro estilo de los Jardines de Babilonia. Situado justo al lado del Barrio Chino, tiene habitaciones cómodas, una piscina infinita con vistas a la ciudad y cuenta con un restaurante donde se sirve un gran buffet de desayuno.
Un Hotel que merece la pena visitar es el Raffles, de estilo colonial y en el que te da la sensación de trasladarte a otra época, pero al que esta vez no pude ir al estar cerrado por reformas.
¡¡Hasta aquí mi agenda por Singapur, espero que os animéis pronto
a ir a esta increíble ciudad de aires tan futuristas!!
Para más información:
www.visitsingapore.com
¡Madre mia es espectacular!.
Besos.
Gemeladas