Mi tía Juanita Luynes no se cansaba de contar como las midinettes parisienses se agolpaban en la puerta del Ritz de Place Vendôme aunque lloviese o tronase para ver salir a madame Martínez de Hoz y estudiar lo que llevaba puesto. La elegante brasileña née Liberal, a la que Manucho Mujica Láinez llamaba “La dulce Dulce”, estaba casado con Eduardo, un franco argentino con una importante cuadra de carreras que era, además, uno de los principales accionistas de Vionnet.
En la actualidad, las midinettes no tendrían que tomarse la molestia de hacer camping delante de las puertas del Ritz ya que cada una de las toilettes de Dulce aparecería colgada en Instagram momentos después. No por ella. No era para nada vanidosa, aunque le gustó que André Malraux, en su momento glorioso como Ministro de Cultura francés, le dijese que siempre había estado enamorado de ella. No la veo haciéndose selfies en los hipódromos de Deauville o Chantilly con los vestidos de haute couture de Antonio Castillo y Christian Dior, dos de los couturiers a los que recurrió cuando Vionnet cerró sus puertas o posando para su community manager.
Hasta el advenimiento de las redes sociales uno solo podía seguir los periplos de las mujeres elegantes o bien vestidas en las páginas de los mensuales femeninos y, más adelante, entremezcladas con las estrellas del showbiz, royals “akotufadas” y famosas de Serie B o C en las revistas peluqueriles de este país. Hoy en día no hay más que darle al icono de una pantalla táctil para enterarte cual es la vestimenta du jour de las autoproclamadas it girls, blogueras, o fashionistas de turno. Lo recomiendo, es muy instructivo.
Estoy seguro que si Diana (“Diane” a la francesa para sus amigos) Vreeland viviese hoy, estaría colgada todo el día a Instagram ya que el progreso le fascinaba. Como lo está, recomiendo seguirla, la periodista Suzy Menkes. Pero no me imagino a Jacqueline de Ribes, Daisy Fellowes, Diana Cooper, Babe Paley y todas las que decoraban el Hall of Fame de Eleanor Lambert, en manos de un community manager que inmortalizara cada uno de sus atuendos.
CARLOS GARCIA-CALVO es escritor y periodista, lleva desde 1994 escribiendo sobre moda en las páginas de EL MUNDO. Ha colaborado con secciones fijas en revistas como MARIE CLAIRE, VOGUE, TELVA y CONDÉ NAST TRAVELER. Entre sus libros publicados se encuentran COMO SER UNA MUJER A, NO COMAS EL POSTRE CON CUCHARA, CUENTASELO A ROSI todos con PLANETA y TE VESTIRÉ COMO UNA REINA con Temas de Hoy. En su andadura televisiva se encuentran programas como EXTRA ROSA, SABOR A TI o MADRID A LA ÚLTIMA.
Hola, me encanta su blog 🙂
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