Mi carácter inquieto, es el responsable de que muchos fines de semana, en vez de quedarme relajada en casa y descansando, prefiera lanzarme a coger mi Peugeot SUV 2008 para descubrir más lugares con encanto y aprender nuevas cosas, ya que viajar es como un libro abierto.
El cuero sigue siendo tendencia, y para ir a un cocktail de tarde/noche, rescaté del armario esta falda, vintage y corte años 50, que compré hace un par de años en mi tienda de ropa vintage favorita del mundo que se llama Kiki Ritz y que está en Biarritz. La combiné con un body de bailarina negro, medias de rejilla, cinturón ancho de top shop y zapatos de Louboutin. Como accesorios: una capa de pelo de Nelsy Chelala y bolso de Vera Blonde.
El fin de semana que estuve en Biarritz tuvo lugar la famosa “Grande Braderie”, que se suele hacer dos veces al año, y consiste en que más de 150 tiendas de la ciudad, sacan productos a la calle (muchos de marcas muy top!!) para vender, y a un precio muy rebajado.
Fue hace un par de años cuando descubrí la maravillosa Biarritz. Esta ciudad francesa me cautivó desde el primer momento que la pisé, y desde entonces, siempre muero por volver.
